¡Envíos gratuitos en pedidos superiores a 65€!

Obsolescencia programada ¿También en la ropa?

No es algo nuevo hablar de electrodomésticos y pequeños gadgets electrónicos que han sido diseñados para fallar justo en ese momento. En ese momento tan temido por los consumidores. Justo un par de meses después de que la garantía del producto a vencido. Habrá quién crea que es mala suerte, y adquiera un nuevo producto. 

Pero a esa teoría, tan cruel como real, en la que la marca ha diseñado algún componente predestinado a fallar en un determinado tiempo de uso o ciclos, con el único objetivo de que vuelvas a consumir y comprar un producto nuevo, no se le puede hacer caso omiso. Eso es precisamente lo que se conoce como “Obsolescencia Programada”. La cuestión es… ¿También sufrimos estas estrategias en sectores como la moda, o es diferente?

Esa tendencia impuesta por las marcas textiles a cambiar el armario cada poco tiempo, pocas veces se debe a que la vida útil de la prenda haya llegado a su fin. La mayoría de veces, nos deshacemos de ropa que ya no utilizamos porque no concuerda con nuestro estilo. Realmente, es más que probable que el tejido y la prenda siga estando bien.

Otras veces, por comprar ropa más económica (la cual presupondremos que está fabricada con peores materiales o acabados), creemos que estamos ahorrando dinero, sin tener en cuenta que dentro de unos cuantos lavados y puestas de uso, perderá color, la serigrafía del diseño se descascarillará, las etiquetas se borrarán, etc. Y esto derivará en una nueva y temprana compra porque esa sudadera que tanto te gustaba ha encogido en la lavadora.

No tenemos pruebas, pero tampoco dudas, de que en las marcas prevalece el objetivo de vender más ropa por muy sostenible que sea su discurso. Si hacen algo indestructible (que seguramente tengan la capacidad para ello), no será sin pensar antes cómo harán para que deje de serte útil y sientas la necesidad de renovarlo.

En NEUK, creemos que es posible ofrecer un consumo más ético y responsable, además de económico para el comprador. Por eso basamos nuestra propuesta, no solo en materiales sostenibles de alta calidad, si no en detalles y diseños duraderos o fácil y económicamente reemplazables.

¿De que sirve comprar ropa ecológica si seguimos comprando nuevas prendas cada poco tiempo? ¿Es cuestión de cambiar los materiales, o es cuestión gastar menos recursos de producción y aprovechar al máximo aquello que fabricamos?

Descubre nuestra propuesta aquí.